Un increíble pastel de chocolate con un toque especial. Es suave, esponjoso, algo parecido a un trufa, una interesante combinación de canela, anís estrellado y chocolate negro, para mí, simplemente perfecto. Este pastel es realmente festivo e invernal. Se puede servir con una bola de helado o, por ejemplo, con una taza de vino caliente.