Bizcocho sin separar las yemas de las claras de huevo
Una receta de bizcocho muy exitosa que siempre resulta y no presenta ningún problema. El bizcocho resulta suave, esponjoso y alto. Con un diámetro de molde de 30 cm, la altura del bizcocho es de 5-6 cm. ¡Altamente recomendado!
Huevos
5 unid.
Azúcar
1 vaso (240 g)
Sal
una pizca
Azúcar avainillado
1 sobre (8 g)
Harina
1 vaso (160 g)
Almidón
1/2 vaso (70 g, de maíz o trigo)
Polvo de hornear
1 sobre (15 g)
Para preparar el bizcocho sin separar las yemas de las claras, primero precalentamos el horno a 180 grados. Preparamos un molde para bizcochos cortando un círculo de pergamino del mismo diámetro que el molde y tiras para los lados del molde que pueden ser un poco más altas que el molde. Untamos el molde con aceite o margarina, y luego pegamos el círculo y las tiras de pergamino. El molde está listo y podemos estar seguros de que sacaremos fácilmente el bizcocho terminado del molde.
En un tazón de una batidora, rompemos los huevos, agregamos el azúcar, la sal y el azúcar avainillado. Batimos hasta obtener una masa blanca esponjosa.
Tamizamos la harina en un tazón aparte junto con el almidón y el polvo de hornear.
Cuando los huevos estén batidos, ponemos la batidora a la velocidad más baja y agregamos la harina tamizada con el almidón y el polvo de hornear poco a poco.
Vertemos la masa en el molde, nivelamos un poco hacia los bordes y horneamos en el horno precalentado durante 30 minutos. Durante los primeros 15-20 minutos, no abrir el horno ni golpear la puerta. El bizcocho es muy sensible y caprichoso.
Comprobamos que el bizcocho está listo con un palillo (debe salir seco). Al presionar la superficie del bizcocho terminado con un dedo, debería rebotar y recuperar su forma inicial.